El fuerte olor a combustible alertó a los vecinos de la comunidad de Tlapacoya, sobre una fuga de gasolina por una toma clandestina en un ducto de Petróleos Mexicanos (PEMEX), en tierras de cultivo, y ante el temor de que pasara una desgracia, dieron parte de manera inmediata al número de emergencias 911.
Indicaron que un intenso olor a combustible se percibía en la zona, lo cual movilizó a los cuerpos se seguridad de la región, arribando de inmediato policías municipales de esta localidad.
Al llegar las autoridades, encontraron una toma clandestina conectada a un ducto de Petróleos Mexicanos (PEMEX). La válvula estaba prácticamente abierta, lo que provocó un derrame masivo de hidrocarburo a través de una manguera instalada de forma ilegal.

Se estima que miles de litros de combustible quedaron esparcidos en el predio, representando un alto riesgo ambiental y de seguridad para la comunidad.
La zona fue asegurada y se dio aviso al personal de Seguridad Física de PEMEX, quienes procederán a clausurar la conexión de manera definitiva, y así mismo se pidió la intervención de las autoridades del medio ambiente, para recuperar las tierras afectadas por el combustible.